Quienes tienen mayor riesgo de morir a causa de las vacunas de ARNm contra el Covid 19
COVID-19 son aquellas personas con una enfermedad inflamatoria como la artritis reumatoide, enfermedad de Parkinson o enfermedad de Lyme crónica, así como aquellas con inmunodeficiencia adquirida de cualquier patógeno o toxina ambiental
Lamentablemente, cada vez surgen más informes de personas de todas las edades, en todas las circunstancias de salud, que mueren repentinamente después de las vacunas COVID-19.
Descripción general de la experiencia del mundo real y la evidencia de lesiones y muertes generalizadas por la vacuna contra el covid: documentación del enorme aumento de los problemas de salud y las muertes desde el lanzamiento de la vacuna
Una lista de puntos de datos clínicos que documentan la carnicería asociada con la vacuna para mostrarle a su médico local a favor de la vacuna
TheCOVIDBlog.com 2 de abril de 2022 BUCAREST — Un jugador profesional de waterpolo de 23 años ha muerto, ya que los atletas de todos los deportes continúan muriendo a un ritmo alarmante.
TheCOVIDBlog.com 3 de abril de 2022 DUBLÍN — Un estudiante de enseñanza y talentoso futbolista de 21 años ha muerto, ya que los principales medios de comunicación se niegan a preguntar sobre el probable culpable.
Después de contemplar lo sucedido estos dos ultimos años y sobre todo tras la implantación de pinchazos experimentales de terápias génicas,hemos visto como los despiadados medios heredados mintieron y ocultaron información vital a millones de personas que creyeron que la “vacuna”era lo que incesantemente les habían repetido: “Segura y eficaz”.Fueron engañados por politicos parásitos,traicionados por médicos que anteponen sus propios intereses personales a los intereses de los pacientes y coercionados en el trabajo con consecuencias fatales para cientos de miles de víctimas que perdieronde este genocidio silencioso.
Por qué las vacunas no pueden proteger contra la infección
Un error fundamental que subyace en el desarrollo de las vacunas contra la COVID-19 fue ignorar la distinción funcional entre las dos categorías principales de anticuerpos que el cuerpo produce para protegerse de los microbios patógenos.
Ni seguras ni efectivas: las vacunas contra el COVID son peligrosas y no deben usarse
Los datos de gobiernos y universidades en los EE. UU. y varios países muestran las siguientes muertes y lesiones relacionadas con las vacunas contra el COVID.
“Algunas de las trágicas historias de vidas de niños destruidas después de las vacunas COVID-19 que hemos cubierto aquí.El número de lesiones y muertes registradas en la base de datos del Sistema de Informe de Eventos Adversos a las Vacunas (VAERS, por sus siglas en inglés) del gobierno de los EE. UU. después de las vacunas contra el COVID-19 ha llegado a 1,2 millones de casos a partir de la última actualización del viernes 1 de abril. ( Fuente .)
A modo de contraste, hay 930,952 casos de lesiones y muertes después de todas las demás vacunas durante los últimos 30 años antes de que se emitieran autorizaciones de uso de emergencia para las vacunas contra el COVID-19 en diciembre de 2020. ( Fuente)”
Los documentos de la vacuna Covid-19 de Pfizer contrarrestan la narrativa "segura y efectiva"
9 páginas de efectos secundarios, 158 893 eventos adversos, 42 086 informes de casos, 1223 muertes en los primeros tres meses de Pfizer y una tasa de mortalidad récord entre los millennials estadounidenses durante la segunda mitad de 2021.
.Los datos estaban a la vista del público en enero de 2021 de que las vacunas eran demasiado inseguras para su uso en humanos. En febrero, era aún más evidente. Hasta el día de hoy, los CDC nunca han reconocido esta señal de seguridad.
La negación de la inmunidad natural ha prolongado la pandemia y ha restringido innecesariamente la vida de las personas recuperadas de Covid. Las mascarillas, los confinamientos y otras restricciones han causado un gran daño, especialmente a los niños, y han retrasado la transición del virus a un estado endémico.
Las agencias e instituciones de salud deben dejar de interferir en la relación médico-paciente . Los formuladores de políticas son directamente responsables de cientos de miles de muertes, como resultado de la interferencia institucional y el bloqueo de tratamientos que han demostrado curar a una tasa cercana al 100% cuando se administran temprano.
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La base de datos oficial de certificados de defunción de Massachusetts contiene pruebas de que las "vacunas" C19 mataron a miles de personas en Massachusetts en 2021.
Este artículo detalla un viaje forense en un análisis forense único en su tipo, de fuerza bruta, peatonal, de los datos oficiales del gobierno de Massachusetts para descubrir qué sucedió y está sucediendo en una población de ~ 6.9 millones de personas al frente de C19 "ciencia." Massachusetts es un exportador de tecnología médica y farmacéutica líder en el mundo. Algunos líderes dicen que es un modelo para la planificación de respuesta C19. La verdad es que Massachusetts es un modelo
La genotoxicidad describe el daño inducido químicamente a la información genética que causa mutaciones 1 (un cambio en la secuencia de ADN) y puede provocar cáncer.
La carcinogenicidad es descriptiva de la capacidad de inducir cáncer y recuerde, ¡un carcinógeno no necesariamente tiene que ser una toxina!
En definitiva, el que todavía no dispongamos de unos estudios de toxicología es una anomalía cada vez más insostenible
“Editor de ER: Recomendamos encarecidamente este artículo como una ventanilla única para obtener explicaciones sobre los VARIOS efectos nocivos en el cuerpo de la PROTEÍNA SPIKE , ya sea a través de Covid-19 en sí o CUALQUIERA de las inyecciones de terapia génica. Apuntar a la vacuna de AstraZeneca para críticas especiales ha sido una forma de psicópata en el público, claramente.
Lea el artículo a continuación para saber cuáles son estos efectos nocivos de la proteína Spike .
Debemos recordar que las 'vacunas' desarrolladas han convertido todos nuestros cuerpos en fábricas productoras de proteínas de pico, es decir, los vacunados están produciendo trillones de PROTEÍNAS DE PICO TÓXICOS dentro de sí mismos de forma continua.”
El Dr. Burkhardt y sus colegas llevaron a cabo recientemente una serie de 17 autopsias de personas fallecidas entre días y meses después de la vacunación. Inicialmente, ninguna de estas muertes se había atribuido a las vacunas. Sin embargo, Burkhardt y sus colegas encontraron lesiones características en múltiples órganos que los llevaron a concluir que en la mayoría de los pacientes las vacunas probablemente fueron la causa de la muerte. Las observaciones clave fueron vasculitis generalizada con microtrombos, así como una intensa infiltración linfocítica de múltiples órganos. Un resumen de estos hallazgos ha sido publicado antes [ 1 ] . Más recientemente, él y sus colegas también demostraron la expresión de la proteína espiga, inducida por la vacuna, dentro de las lesiones inflamatorias [ 2 ] .
En particular, el Dr. McCullough cita un estudio de Harvard que mostró que tan solo el 1% de los eventos adversos en realidad se informan a VAERS.
Los eventos adversos de los medicamentos y las vacunas son comunes, pero no se notifican. Aunque el 25 % de los pacientes ambulatorios experimentan un evento adverso por medicamentos, menos del 0,3 % de todos los eventos adversos por medicamentos y del 1 al 13 % de los eventos graves se notifican a la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA). Asimismo, se notifican menos del 1% de los eventos adversos de la vacuna. — “Electronic Support for Public Health–Vaccine Adverse Event Reporting System (ESP:VAERS)” , 1 de diciembre de 2007- 30 de septiembre de 2010
Algunos interpretan estos tiempos tan prolongados como un indicio de que el ARNm pudiera estar integrándose en el genoma del vacunado. Este estudio con simulaciones in vitro replica el proceso de transcripción inversa del ARN al ADN, pero hay que contextualizar esas simulaciones porque el proceso está acelerado dado que son células cancerígenas que tendrían activado un oncogén por el que se dividen continuamente. Esto simplemente indica que es un proceso posible en determinadas condiciones, es decir con suficiente cantidad de LINE1, pero un cultivo celular no es el cuerpo humano. Lo que sí es interesante de este estudio es que se detecta un aumento en suero de LINE1 después de la inoculación, el equilibrio de LINE1 es crítico en las primeras semanas de gestación, demasiada o muy poca expresión de LINE1 detiene el desarrollo del embrión. De abortos espontáneos y gestaciones interrumpidas si que tenemos evidencias en los datos de VAERS.
El CDC y la FDA ahora han firmado oficialmente el enriquecimiento de Pfizer en BILLONES de dólares este año, a cambio del servicio de dar a millones de niños una vacuna riesgosa que no necesitan.
Las miles de muertes fetales registradas tras las vacunas contra el COVID-19 que nadie quiere denunciar y que Facebook se esfuerza por censurar
por Brian Shilhavy Editor, Noticias de Impacto en la Salud
La base de datos del Sistema de Informe de Eventos Adversos a las Vacunas (VAERS, por sus siglas en inglés) del gobierno de los EE. UU. se actualizó el pasado viernes 11 de marzo de 2022 y ahora informa que ha habido 1,168,894 casos de lesiones y muertes después de las vacunas COVID-19 desde diciembre de 2020, cuando el La FDA emitió autorizaciones de uso de emergencia para las vacunas COVID-19. ( Fuente .)
A modo de contraste, hubo 926 031 casos de lesiones y muertes después de todas las vacunas aprobadas por la FDA durante los más de 30 años anteriores , desde 1990 hasta noviembre de 2020. ( Fuente ).
Por lo tanto, se han registrado más lesiones y muertes en VAERS durante los últimos 15 meses después de las vacunas contra el COVID-19, que durante los más de 30 años anteriores combinados después de todas las vacunas registradas en VAERS.
Las muertes fetales aumentan en un 3525 % después de las vacunas contra la COVID-19
El autor de este informe es un experto académico muy experimentado y acreditado que, sin embargo, por el momento prefiere permanecer en el anonimato. Él y su equipo han descubierto que tres de las cuatro "vacunas" COVID-19 basadas en genes están contaminadas con una gran cantidad de partículas metálicas. Las contaminaciones por sí solas son motivo suficiente para detener la fabricación de estas “vacunas”.
La alta concentración en la sangre de la proteína espiga después de la vacunación y su persistencia junto con el ARNm de la vacuna en los ganglios linfáticos durante meses, en contraste con la situación posterior a la infección, donde dicha persistencia es rara, generará preocupaciones sobre la seguridad de estas vacunas contra el COVID. Se ha argumentado que la proteína espiga en sí misma es patógena , no inerte, y que las proteínas espiga libres generadas por las vacunas tienen mayor capacidad para unirse a más tipos de células que las propias partículas del virus, y que esto puede ser lo que se esconde detrás de muchas de los eventos adversos graves informados a los organismos reguladores e identificados en los informes de casos. Esto amerita una mayor investigación. (énfasis añadido).
Quién pudiera comprender después de las miles de muertes reportadas de estas “vacunas”
La organización ha informado 367 casos de tinnitus entre quienes recibieron al menos una inyección de la vacuna COVID-19, y la condición se caracteriza por zumbidos en los oídos, generalmente dentro de los días posteriores a la administración de la vacuna al paciente.
Los que han experimentado este efecto secundario tenían entre 19 y 91 años y procedían de 27 países diferentes, incluidos Italia, Estados Unidos y el Reino Unido. Casi el 75 por ciento de estos informes provino de mujeres.
En Europa informaron 41.834 muertes y 3.900.241 lesiones después de inyecciones, de cuatro inyecciones experimentales de COVID-19, hasta el 15 de marzo de 2022 En EE.UU. incluyeron un total de 1.183.495 informes de eventos adversos de todos los grupos de edad después de las inyecciones COVID, incluidas 25.641 muertes al 11 de marzo de 2022.
A pesar de los pocos estudios,de solo poseer una AUE(Autorización Uso Emergencia)Ensayo fase 3 y de su naturaleza experimental,los medios engañaron a cientos de miles haciendoles creer que las “vacunas” eran seguras y efectivas.
Los datos DMED son explosivos. Se ha ordenado a los principales medios que lo ignoren. Los datos DMED expuestos por el abogado Tom Renz y el senador Johnson son una prueba irrefutable. El general Austin debería ordenar a todos los médicos militares que digan la verdad. Pero no lo es. ¿Por qué no? steve kirsch 5 de febrero 799 537 Resumen La base de datos médica utilizada por el ejército de los EE. UU. muestra un gran aumento en los eventos graves en 2021. Solo se elevaron los eventos causados por la vacuna (como se indica en el aumento en los informes VAERS para estos síntomas). El Departamento de Defensa ha afirmado que el aumento se debió a que los eventos de años anteriores no se informaron y corrigieron el error. Se ha dicho a los principales medios de comunicación que no toquen esta historia. Es por eso que hay un completo apagón informativo sobre la historia del año. Su explicación no se sostiene por varias razones
El número de accidentes cerebrovasculares después de las vacunas COVID-19 se encuentra aquí , y el número de accidentes cerebrovasculares después de todas las vacunas durante los 30 años anteriores se encuentra aquí
El número de casos de enfermedad cardíaca (todos los casos de *carditis) después de las vacunas COVID-19 se encuentra aquí , y el número de casos de enfermedad cardíaca después de todas las vacunas durante los 30 años anteriores se encuentra aquí
La mayor amenaza para la seguridad nacional de los Estados Unidos hoy en día es nuestro propio gobierno, y los multimillonarios y banqueros de Wall Street que financian a las grandes farmacéuticas que parecen tener el gobierno en el bolsillo, y eso incluye a ambos partidos políticos.
Stephanie Seneff, Ph.D., científica investigadora principal del Laboratorio de Ciencias de la Computación e Inteligencia Artificial del MIT en Cambridge, Massachusetts, dijo a Fox News que vacunar a los jóvenes contra el COVID puede causar enfermedades neurodegenerativas graves, como el Parkinson y el Alzheimer. Darles a los jóvenes inyecciones contra el COVID probablemente causará un “aumento alarmante en varias enfermedades neurodegenerativas importantes”, Stephanie Seneff, Ph.D. Los jóvenes tienen un «riesgo muy bajo» de morir a causa del virus, dijo Seneff
El riesgo de muerte asociado con COVID-19 en niños sanos es prácticamente inexistente, ya que los niños tienen ventajas inmunológicas significativas en relación con la población de adultos mayores (> 65 años) que comprende la cohorte de alto riesgo de COVID-19
Las catecolaminas son el desencadenante clave de la miocarditis y muertes súbitas inducidas por la vacuna mRNA SARS-CoV-2 y mRNA COVID-19: una hipótesis convincente respaldada por hallazgos epidemiológicos, anatomopatológicos, moleculares y fisiológicos.
Los niños no están en riesgo por el supuesto virus SARS-CoV-2, por lo tanto, una vacuna para protegerlos contra el virus SARS-CoV-2 es innecesaria y no es necesaria. Entonces, ¿por qué demonios las "grandes farmacéuticas" están realizando experimentos en niños de 6 años y planean vacunar a todos los niños para fin de año?
Mientras el riesgo de Covid para los niños en igual a 0,los riesgos del pinchazo son aterradores y cualquier padre que opte inocular sueros experimentales a sus hijos sin antes haberse minimamente informado es sin duda,minimo un irresponsable.
Entonces, en pocas palabras, el plan de la administración Biden mataría a 5248 niños a través de inyecciones de ARNm de Pfizer para evitar que 45 niños mueran de coronavirus. Por cada niño salvado por el disparo, otros 117 morirían por el disparo”.
Solo un estudio examinó los datos de VAERS, los investigadores encontraron que la incidencia de eventos adversos cardíacos (CAE, por sus siglas en inglés) después de la vacunación para niños de 12 a 17 años equivale a 162,2 por millón de niños sin comorbilidades médicas y es más alta en niños de 12 a 15 años. La tasa de eventos supera con creces la tasa de hospitalización por COVID-19 de 120 días esperada tanto en la incidencia de hospitalización moderada (tasas del 21 de agosto de 2021) como en la alta. Esta evidencia se ve reforzada por la última evaluación publicada por el Comité Asesor sobre Prácticas de Inmunización (ACIP) el 30 de agosto, "los datos disponibles hasta la fecha sugieren una asociación de miocarditis con la vacunación de ARNm en adolescentes y adultos jóvenes".
Los datos de este gran grupo de niños en Nueva York demuestran que la inyección contra el COVID brinda poca o ninguna protección contra la infección por SARS-COV2. El estudio examinó la incidencia de la infección por COVID-19 y las tasas de hospitalización en 365.502 niños de 5 a 11 años y 852.384 adolescentes de 12 a 17 años, tanto en personas totalmente vacunadas como no vacunadas. Esto no es sorprendente dada la rápida aparición de la variante Omicron. Estos mismos datos indican que los niños no vacunados ya están protegidos de la infección, obviando la necesidad de cualquier forma de profilaxis en este grupo de edad. Por lo tanto, cualquier propuesta para aumentar la dosis no solo es innecesaria, sino que invita a un mayor riesgo de daño. Con beneficios tan marginales y decrecientes, no se puede justificar continuar con la vacunación.
Steve Kirsch, Director Ejecutivo del Fondo para el Tratamiento Temprano de Covid-19, fue invitado a hablar en la reunión y, debido al poco tiempo que se le dio para hablar, sintió que era mejor preparar 30 diapositivas que hicieran algunas preguntas extremadamente serias sobre la seguridad de dar una inyección experimental a los niños.
Todas las preguntas formuladas por el Director Ejecutivo del Fondo de Tratamiento Temprano Covid-19 fueron preguntas que él cree que deben responderse antes de cualquier votación para autorizar la vacunación contra el Covid-19 para niños de 5 a 11 años, y fueron las siguientes...
La Dra. Sherry Tenpenny, doctora en medicina osteopática, certificada en tres especialidades médicas, informó de ello en un reciente vídeo. Numero considerable de mujeres de todo el mundo informan de la interrupción de sus ciclos menstruales después de recibir la vacuna K0 B¡T. El gobierno del Reino Unido recopiló más de 2.200 informes de trastornos reproductivos luego de la administración de las vacunas de AstraZeneca y Pfizer, incluyendo sangrado menstrual excesivo o ausencia del mismo, dolor inusual en los senos, retraso en la menstruación, hemorragias vaginales, abortos espontáneos y nacimientos de niños muertos.
Graves errores de seguridad en estudios que justifican la inyección K0 B1T en embarazadas Embarazadas, vacunas
Cuando fue publicado el estudio de Shimabukuro y colaboradores en mayo de 2021 «Hallazgos preliminares de la seguridad de la vacuna mRNA Covid-19 en personas embarazadas «(https://pubmed.ncbi.nlm.nih.gov/33882218/), muchos científicos y médicos saltaron felices y prestos para usarlo como evidencia de que las vacunas de ARNm eran seguras para usarse en mujeres embarazadas. Esto fue porque de acuerdo a esos autores, «Los hallazgos preliminares de su estudio no demostraron señales de [falta de] seguridad obvias entre las mujeres embarazadas que recibieron las inyecciones de ARNm contra Covid-19«.
Más muertes y casos de reacciones adversas después de vacunas experimentales contra el COVID-19 en un año que después de TODAS las vacunas aprobadas por la FDA en los últimos 30 años o más
Ahora hay 1,842,459 casos reportados en la base de datos VAERS desde su inicio en 1990, que incluye 29,859 muertes totales reportadas. ( Fuente .)
De estos 1,842,459 casos durante los últimos 30 años, más de la mitad de ellos, 983,758 casos, se presentaron el año pasado luego de las vacunas experimentales de COVID-19. ( Fuente .)
De las 29 859 muertes registradas después de las vacunas durante los últimos 30 años o más, 20 622 de esas muertes (casi el 70 %) se registraron en el último año después de las vacunas experimentales de COVID-19. ( Fuente .)
Entonces, antes de las vacunas contra el COVID-19 el año pasado, el promedio de muertes anuales después de todas las vacunas fue de 308 muertes por año.
Eso es 67X más muertes por año después de las vacunas COVID-19 según las estadísticas del primer año.
